50 años de litigio y señalamientos por corrupción institucional ¿Un caso Magnitsky en Costa Rica?
Familia Paniagua denuncia despojo estatal de la Hacienda Palmares en Papagayo: — Desde hace más de cinco décadas, la familia Paniagua Mendoza sostiene una batalla judicial contra el Estado costarricense, en un conflicto que gira en torno a la propiedad de la antigua Hacienda Palmares, hoy parte del cotizado Polo Turístico Golfo de Papagayo, donde se ubican reconocidos complejos hoteleros como el Four Seasons, el Andaz, el Ritz Carlton y otros desarrollos inmobiliarios de lujo.
¿Un caso Magnitsky en Costa Rica?
Según ha denunciado Frank Paniagua Mendoza, abogado e hijo de los propietarios originales, su familia fue despojada de forma ilegítima de una finca de aproximadamente 649 hectáreas que adquirieron legalmente en los años 60. El terreno, ubicado frente al mar en la península de Papagayo, fue inscrito por el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) como propiedad estatal en la década de 1970, según relata Paniagua, sin mediar expropiación legal válida ni compensación económica.
“Se inventaron un papel falso, que la Fiscalía hoy investiga, para justificar que la finca no tenía dueño y pasarla al Estado. A partir de ahí la repartieron entre concesionarios privados, grandes empresarios y hoteles internacionales. Y todo esto, sin pagar un solo colón a mi familia”, ha declarado el abogado en distintos medios.
Entrevistas realizadas por el Periodista Camilo Rodriguez | 13 may 2023.
La historia detrás de la finca
Manuel Paniagua Rodríguez y Alba Mendoza, padres del denunciante, adquirieron la finca conocida como Hacienda Palmares mediante proceso legal y con títulos debidamente registrados. Por razones financieras ligadas a actividad ganadera, enfrentaron deudas en los años 70, lo que, según el relato familiar, fue aprovechado por autoridades para inscribir la finca a nombre del Estado sin seguir los debidos procesos judiciales.
Desde entonces, el conflicto se ha extendido por más de 50 años, con múltiples acciones legales en la vía penal y contencioso-administrativa. A lo largo del proceso, Paniagua ha señalado directamente al ICT, a la Procuraduría General de la República y a varios funcionarios y expresidentes por presuntas irregularidades.
Investigación penal en curso
Uno de los documentos claves del caso, calificado por Paniagua como “el papelucho de la discordia”, fue inscrito por el ICT como prueba de que la finca carecía de dueño. Este documento se encuentra actualmente bajo investigación en el Ministerio Público, específicamente en el Circuito Judicial de Liberia, por presunta falsedad ideológica.
El caso penal aún está abierto. La defensa de la familia ha solicitado peritajes grafológicos, inspecciones judiciales y comparecencias de exfuncionarios públicos que habrían intervenido en el proceso de inscripción y traspaso de terrenos.
Denuncias de corrupción estructural
Frank Paniagua sostiene que lo ocurrido no es un caso aislado, sino un “esquema de corrupción institucional” que permitió al Estado tomar posesión del terreno para luego concesionarlo a consorcios privados, nacionales y extranjeros, bajo lo que él denomina un “metaverso jurídico‑inmobiliario”.
En palabras del denunciante, se trata de una red de traspasos opacos, concesiones no fiscalizadas y explotación económica por parte de empresas multinacionales en terrenos que, afirma, “fueron arrebatados ilegalmente”.
Además de presentar sus denuncias ante instancias nacionales, como la Procuraduría de la Ética Pública y el Ministerio Público, Paniagua asegura haber elevado sus reclamos ante organismos internacionales y agencias de investigación como el FBI, por sospechas de lavado de dinero y evasión fiscal en el manejo de los proyectos turísticos en Papagayo.
Reivindicación y publicaciones
En un intento por visibilizar su caso, Frank Paniagua ha publicado los libros “Papagayazo: la reivindicación de la Hacienda Palmares” y “Papagayo: Costa Rica, un emporio levantado sobre cenizas”, donde detalla los antecedentes, documentos involucrados y los actores que, a su juicio, permitieron que se consolidara este despojo.
“Papagayo se construyó sobre el robo. Un robo que ha durado más de medio siglo y que ningún gobierno ha querido corregir”, sostiene.
Audiencias interrumpidas y conflictos judiciales
La tensión en torno al caso ha escalado incluso en el ámbito judicial. En 2024, una visita judicial a la zona fue suspendida luego de un altercado entre Paniagua y personal del tribunal. También se registraron incidentes en audiencias donde el abogado fue expulsado por cuestionar duramente a jueces y fiscales.
A pesar de ello, los procesos continúan activos. La familia insiste en que tiene derecho a la restitución plena de la finca o a una indemnización completa, con base en las pruebas que, aseguran, desmontan la legitimidad de la inscripción estatal.
Exigen revisión institucional
El caso de la Hacienda Palmares pone en cuestión los procesos de expropiación, inscripción y concesión de tierras en zonas de alto valor turístico. La familia Paniagua exige que se revise la legalidad de las concesiones otorgadas por el ICT en Papagayo, así como la validez de los documentos que justificaron la apropiación estatal del terreno.
Hasta la fecha, ni el ICT ni la Procuraduría General de la República se han pronunciado públicamente sobre las acusaciones concretas de falsificación de documentos ni sobre la investigación penal en curso.