Las constantes labores de vigilancia realizadas por el personal especializado de Recope permitieron detectar la existencia de una toma ilegal de combustible en Peralta de Turrialba (Cartago), mediante la cual se sustrajeron más de 5.000 litros de Jet A1 que, posteriormente, fueron recuperados gracias a un estrecho trabajo con las autoridades policiales.
Una variación anormal en el flujo del poliducto fue detectada por el equipo especializado de Recope durante la noche del miércoles 28 de diciembre, por lo luego de realizar las labores pertinentes y gracias a la rápida acción desplegada por nuestros funcionarios, se coordinó con la Fuerza Pública para la aprehensión de tres sospechosos.
Dos de las detenciones se registraron en el centro de Turrialba, donde se interceptó un camión que llevaba en su cajón tres tanquetas y cinco estañones con combustible, para un total de 4.040 litros de Jet A1.
A seis kilómetros, en San Juan de Turrialba, se detuvo otro vehículo de carga liviana, el cual en su interior llevaba cuatro estañones y dos pichingas. En este caso, la cantidad de combustible que iba dentro de los recipientes sumó 1.032 litros.
Ramiro Núñez, vocero de Recope, indicó que, al parecer, “los dos casos atendidos este 28 de diciembre están relacionados con la toma ilegal detectada en Peralta, por lo que se realizaron las coordinaciones correspondientes con las autoridades”.
Agregó que “el robo de combustible es un delito que afecta a toda Costa Rica y por eso desde Recope se realiza una lucha frontal para evitarlo”.
Acciones contra el robo de combustible
Recope ha destacado en reiteradas ocasiones que este delito es un riesgo para la población, afecta el ambiente y genera pérdidas al país, por lo que se trabaja desde diversas aristas como la prevención, la respuesta inmediata ante un incidente y la rehabilitación.
Además, con el fin de estrechar lazos con la población, está a disposición de las personas la línea telefónica gratuita y confidencial 1002, donde se puede denunciar cualquier sospecha de robo de combustible.
La ley 9852 sanciona con hasta 15 años de cárcel a quienes roban, reciben, transportan y distribuyen el combustible de manera ilegal. De igual forma, se castiga con prisión a quienes dañan el poliducto.
