No confundamos prensa canalla con prensa critica

Esta nota de opinión pretende expandir el criterio de nuestros lectores, quienes conocen que nuestro medio hace un periodismo diferente al acostumbrado, y que en definitiva no es un periodismo que cualquiera pueda entender, ya que requiere de mucha lectura.

Es fácil ver algunos comentarios, es fácil identificar incluso los troles, pero hacer periodismo diferente es simplemente confundir a los que vienen engañando al pueblo costarricense. Y que con el mínimo de recursos, muchas veces logramos mejorar la calidad de información en comparación con equipos de trabajo de planilla millonaria.

La prensa critica no tiene una posición apasionada, ni a favor, ni en contra de políticos, figuras públicas, grupos económicos, ni siquiera en los uniformes de las autoridades.

Para una prensa critica, verá al pueblo como un todo, donde hay gente buena, pero también hay gente mala, y aunque la gente buena es mayoría, la gente mala esta mejor organizada.

De la gente buena y mala de la sociedad, se llevan a ocupar puestos en los tres poderes de la república, en puestos políticos, en presidencias ejecutivas de las instituciones públicas, por lo que una prensa critica siempre va a estar vigilante a las acciones que atenten contra nuestra Constitución Política, y nuestra democracia, un medio de comunicación se convierte en los ojos y oídos del pueblo.

Pero también es importante entender que los medios de comunicación son empresas privadas con fines lucrativos, y que la principal fuente de financiamiento es la venta de publicidad, pero que se han visto seriamente afectados por el ingreso de las plataformas como Facebook o Google Ads, mucho mas baratas, pero que pueden poner en riesgo a muchas marcas.

Pero, podemos identificar a la prensa canalla cuando no cuestiona los casos de corrupción, cuando se parcializa a intereses económicos vendiendo publicidad como si fuera una noticia, cuando utiliza el miedo para impulsar el consumo de una marca o productos, cuando se parcializa al punto que no acepta debates públicos para que no se exponga la marca que pauta en su medio de comunicación.

Pero aun mas preocupante que la prensa canalla, es el periodismo sin vocación, que carece de ética y moral, incapaz de reaccionar ante las voces de alerta que ponen en riesgo la paz social, a cambio una estabilidad laboral temporal. Un periodismo egoísta que ha dejado de lado el humanismo.

Por eso, en nuestro medio verás temas incómodos, pero de interés social, no por querer hacer amarillismo, sino porque la información oportuna permite a la ciudadanía participar en el destino del país, que aun cuando políticos dicen que solo podemos poner el voto entre las opciones que ellos nos ponen, es mucho mas lo que podemos hacer.

Incluso, el pueblo puede organizarse para crear otro poder de la República, por ejemplo, crear un tribunal soberano, donde se pueda llevar a enjuiciar a políticos corruptos en cualquiera de los poderes de la república. Bueno, para explicar mejor les dejamos el siguiente pdf.

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