La ideologías implantadas desde nuestros sistemas educativos, mediante la manipulación social que afecta a todos los países de América Latina, es un tema que debemos analizar con lupa, ya que las nuevas generaciones se vienen desarrollando con distintas carencias cognitivas de muy alta importancia para generar ciudadanos de alto valor, y no solo mano de obra para las tras-nacionales.
Las enseñanzas como el desarrollo del sistema social democrático en el que Costa Rica se fundamenta desde hace 200 años, se han venido deteriorando, pero no es solo nuestro país, tenemos que entender que son grandes empresas políticas que se dedican a transformar ideologías, para que las tradiciones y la autodefinición como pueblo sea borrado de nuestra memoria histórica, si un ciudadano no conoce sus derechos, jamás va a reclamar y luchar por ello.
Nunca se escuchó la palabra Debate Público en el tema del préstamo del FMI que impulsó el cuestionado ex presidente Carlos Alvarado, tampoco lo vimos para esta sustancia experimental que continúa sin tener un permiso sanitario, sigue siendo experimental porque no se conoce los efectos adversos a mediano y largo plazo, pero extrañamente la lograron incluir en el esquema de vacunación de Costa Rica.
El consentimiento informado, y comunicar a la población los mas de 1000 efectos adversos que las mismas farmacéuticas colgaron en sus páginas web, estuvo ausente, y aun mas preocupante es saber que la misma CIDH emitió una opinión consultiva (del mismo valor que el matrimonio igualitario) que eliminaba la obligatoriedad y obliga a los estados miembros a dar un consentimiento informado.
Contratos blindados a favor de las tras-nacionales, medios de comunicación masiva que emitieron mensajes de odio y señalamiento a quien no pensaba igual que ellos, y tampoco informaron del consentimiento informado, ni abrieron debates científicos, ni informaron efectos o reacciones adversas sufridas por la población, pero si acaparan gran cantidad de la pauta publicitaria pagada por el gobierno.
Mientras tanto, se viene modificando la Constitución Política, leyes, reglamentos y normas, cada día los políticos nos van quitando terreno democrático, al punto que una ex diputada del PLN dijo: “La Clase Política no le tiene miedo al pueblo”.
Y es que los costarricenses, por pacíficos que somos, dejamos en manos de otros la justicia, ¿pero donde ha estado la justicia todo este tiempo?, incluso, nuestro Poder Judicial se viene viendo afectado por estas ideologías, que tratan de medir la eficiencia de nuestros sistema de justicia por estadísticas, indicando que de tantas denuncias, tantos son sentenciados…. Hay que ser muy falto de contacto con la realidad para tomar esto como parámetro, porque se van a condenar a inocentes para aumentar estadísticas, ahora tenemos cárceles llenas ¿y cuantos serán inocentes?
Reconocer un anti-pueblo es fácil, deja la ciencia de lado, se basa en sus prejuicios ideológicos, señala porque ocupa un culpable aunque no sea real, atacan al mensajero porque no pueden atacar al mensaje.
Por eso, es importante, que el país vuelva a recuperar el sistema educativo, que se eduque las nuevas generaciones desde la escuela hasta el ultimo día a no solo ser un profesional con ética, sino en otros valores como al educación cívica para ser mejores ciudadanos, educación económica para ser mejores administradores, en educación vial, para ser mejores conductores o peatones.
El caos es un buen negocio para los grandes empresarios, pero un mal negocio para los medianos y pequeños, aprender a emprender y dinamizar la micro economía desde nuestras comunidades; es una necesidad desde hace un par de décadas.
Dejar sin consecuencias, y en los puestos políticos, a quienes vienen atentando contra la paz social, y el equilibrio de justicia, deben ser enjuiciados por el pueblo, y para eso se requiere un pueblo mejor organizado, mientras tanto seguiremos siendo alfombra de quienes saquean las arcas del estado.
Hace falta mas lideres comunales, hace falta mas mentes criticas.
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