El Sector Agropecuario de la Región de Desarrollo Central Oriental 300 ha recibido inversiones por más de ₡37.500 millones de colones de diversas entidades, para el desarrollo de proyectos que pretenden la mejora de las condiciones agroproductivas, de manera que sean más sostenibles y adaptadas al cambio climático, a la vez que más rentables, en beneficio de las personas y familias productoras de esa zona del país.
Parte de estas inversiones, con impacto positivo, son las compras por medio del Programa de Abastecimiento Institucional, PAI, del Consejo Nacional de Producción, por más de ₡26.800 millones.
Por medio de este programa, se han colocado productos como papa, cebolla, chile, zanahoria, remolacha, repollo, chayote, frutas de altura, como la manzana nacional y la granadilla, apoyando de manera directa a los productores de estos cultivos.
Por parte del Instituto de Innovación y Transferencia de Tecnología Agropecuaria, INTA, se han invertido ₡140 millones en proyectos de investigación para el desarrollo de nuevas variedades y semilla mejorada de papa, tanto con recursos propios como de la Fundación para el Fomento y Promoción de la Investigación y Transferencia de Tecnología Agropecuaria de Costa Rica, Fittacori, en beneficio principalmente de 1350 productores paperos aproximadamente.
El Instituto de Desarrollo Rural, INDER, es una de las entidades del Sector que más recursos ha inyectado al sector, mediante sus programas de crédito rural y de Fomento de Apoyo a la Producción y Seguridad Alimentaria, y en el desarrollo de iniciativas productivas, por ejemplo, para el mejoramiento del manejo poscosecha de la mora, lal reducción de vulnerabilidad climática de pequeños y medianos productores, diversificación agropecuaria, entre otras.
Además, el INDER también ha invertido en el desarrollo de proyectos de caminos para traslado de cosechas, fortalecimiento de comercialización, almacenamiento de agua, trazabilidad de café Tarrazú, y otras obras comunales.
Por su parte, el Servicio Nacional de Aguas Subterráneas, Riego y Avenamiento, SENARA, ejecutó obras de riego y reserva de agua para la agricultura, mediante los cuales habilitó 156 hectáreas en favor de unas mil familias productoras.
La Comisión para el Ordenamiento y Manejo de la Cuenca del Río Reventazón (COMCURE) también ha invertido alrededor de ₡165 millones, con el fin de reducir sedimentación y escorrentías y promover la producción agrícola sostenible y la ganadería conservacionista en las fincas a lo largo de dicha cuenca, mediante mejora en el manejo de pastos, uso de cercas eléctricas, ordenamiento territorial, educación ambiental, producción bajo ambientes protegidos, e identificación y protección de manantiales, entre otras prácticas de sostenibilidad que se promueven entre las familias productoras.
La producción sostenible y la conservación de los recursos son bien asumidas por los productores. De esta forma, el Fondo Nacional de Financiamiento Forestal, FONAFIFO, ha distribuido alrededor de ₡3.443 millones en reconocimiento por beneficios ambientales, por la protección de 83.899 hectáreas de bosques en fincas agropecuarias.
Los proyectos en beneficio del Sector Agropecuario de la Región, han contado además con apoyo y recursos de entidades como Fundecooperación y el Fondo de Adaptación, Fomujeres del INAMU, SENASA, SFE, CNE, el IMAS, CNP, la UNA, el BID, Banco Popular Temporalidades de la Iglesia, municipalidades, INA, CITA-UCR, Tecnológico, MICITT. SENARA y MAG, y han impactado positivamente a casi 3 mil productores de manera directa, y unas 4.700 personas de manera indirecta.
La Región de Desarrollo Central Oriental está constituida por los cantones de Cartago, Oreamuno, Alvarado, Paraíso, Turrialba, El Guarco, Jiménez, La Unión, Desamparados, León Cortés, Tarrazú, Dota, Vázquez de Coronado, Moravia, Goicoechea, Curridabat, Montes de Oca y Tibás.
Para el ministro de Agricultura y Ganadería, Renato Alvarado Rivera, los recursos inyectados a la producción agropecuaria, son la mejor forma de asegurar la sobrevivencia de un sector estratégico para el desarrollo del país. “El sector agropecuario es vital para la seguridad alimentaria y para alcanzar un desarrollo sostenible y la justicia social a que aspiramos los costarricenses”, expresó durante la gira oficial a la provincia de Cartago, con motivo de las celebraciones del bicentenario de la Independencia.
Nota de Prensa del MAG/REBS
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