Para entender porque la protesta social y las redes sociales podrían no combinar, es importante entender como funcionan las redes sociales, y como razona la sociedad en las plataformas digitales mas conocidas del mundo.
Al analizar la data de las plataformas para ofrecer publicidad a los cibernautas, los desarrolladores ha creado algo que se llama algoritmos, es simplemente el uso lógico de los datos obtenidos, para maximizar el alcance de una publicación según la segmentación de los intereses a mostrar.
Esta es la razón, por la cual usted debe aceptar los cookies en muchos sitios web, incluidas las plataformas de redes sociales, con ello relacionan tus búsquedas en sitios para mostrarle publicidad relacionada con sus intereses.
Estos algoritmos genera que la comunidad interesada en noticias, y principalmente en lucha social, o denuncia ciudadana logre poco alcance, requieren de compartidas y reacciones para poder aumentar el alcance, sin embargo sigue siendo limitado.
Ahora con los cambios de políticas de las redes sociales, estas se basan en tener un sitio libre de violencia y noticias falsas, por lo que en sus algoritmos configuren como noticias falsas serán simplemente eliminados, ocultados y usted recibirá una sanción, lo que genera una auto-censura de los usuarios.
Por eso, entender que usted puede obtener algunas noticias por redes sociales, no quiere decir que usted esté informado, y que mucha de la información que usted ve fue pagada o impulsada por acuerdos comerciales, lo que no significa que sea algo cierto.
Muchas noticias oficiales, de denuncia e investigación, son censuradas por las plataformas y navegadores por contener información detectada como falsa, aun cuando sea una entrevista de un especialista, o material científico, a esto lo conocemos como la cultura de la cancelación, simplemente lo censuran por temas ideológicos y no científicos.
Por eso, hace dos decadas cuando el internet no era parte de la vida cotidiana de los habitantes del mundo, la comunicación era mas personal, la reunión de vecinos era frecuente y el análisis del comportamiento de los funcionarios públicos era mayormente analizados. Nuestros abuelos a diario se sentaban en una mecedora a escuchar un programa de radio para conocer las noticias mas relevantes.
Si hoy se cayera el internet a nivel nacional o mundial, ¿usted como sobrevivirá?.
Esta manipulación de los algoritmos, junto con la cultura de la cancelación y la censura, ocasiona que las personas sientan la impresión de estar informados, hasta se les ha venido enseñando a dedicar tiempo al entretenimiento para tener paz mental, ya que estar viendo las noticias genera una afectación en la salud mental de la persona. Esto es adoctrinamiento, una puerta que facilita a la corrupción tener menos fiscalizadores en sus actos.
El exceso de información también genera menor retención mental, el mismo efecto que se presentó a los teléfonos inteligentes tener agenda que puede guardar miles de números, esto ha generado que las personas usemos menos la memoria y principalmente el razonamiento, al punto que hasta el champú necesita instrucciones de uso.
Esta falta de análisis de consecuencias de los ciudadanos nos convierte en personas vulnerables a la violación de nuestros derechos humanos, derechos laborales y constitucionales, pues hemos delegado nuestras responsabilidades en extraños que ocupan cargos públicos, y dejamos de fiscalizarlos.
Ese exceso de confianza en terceros, y la falta de fiscalización, con la desinformación, se convierten en el terreno perfecto para que la corrupción siembre sus semillas, y es que mediante la corrupción que si la analizamos se trata de delincuencia organizada, estos van poniendo personas especificas en puestos específicos, para invalidar cualquier denuncia o cuestionamiento en las instituciones públicas.
Una muestra de ello, es como muchas leyes hoy día son mas respetadas por funcionarios públicos, aun cuando van contra la misma Constitución Política, los mismos costarricenses no conocen sus derechos, ¿como pensamos defenderlos?.
Este desconocimiento de la Constitución, mas el desinterés ciudadano de mantenerse informado es el componente perfecto para ser victimas de una dictadura moderna, de un golpe de estado al estilo venezolano.
Por esto, el único método de reaccionar y despertar a la ciudadanía es ir a tocarle la puerta al vecino, conversar sobre lo que ocurre en el país, en leer con nuestras familias la misma Constitución Política e ir organizando nuestros barrios para estar informados.
Por eso, contar con medios informativos y apoyarlos económicamente es una prioridad, quienes han sido censurados al denunciar corrupción pueden entenderlo perfectamente, pues la corrupción siempre avanza entre la administración pública, ese es su negocio, y se paga sus salarios con fondos públicos.
Costa Rica no necesita solo fiscalizar los actos de corrupción, sino exigir a las autoridades el cumplimento de la ley, denunciar siempre públicamente cualquier acto de ruptura del hilo constitucional que hasta la fecha, el silencio nos debe hacer dudar de en manos de quien estamos.
Opinión de Gerardo Ledezma
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