Hoy se llevó a cabo una inspección en la zona de Guararí, donde recientes deslizamientos han comprometido varias estructuras. El geólogo Blas Dánchez Ureña, del CNE, estuvo acompañado por miembros del Comité Municipal de Emergencias y del Ministerio de Salud durante el recorrido.
En esta inspección se identificaron al menos cinco edificaciones en condiciones críticas, debido a desprendimientos y al deterioro de sus cimientos. Según Dánchez Ureña, no se observaron evidencias de agrietamiento, pero sí se notaron condiciones de construcción precarias, empleando materiales no adecuados. Esta situación podría provocar un colapso en cadena, afectando a otras estructuras cercanas.
La zona, ubicada en el cañón del río Pirro, presenta inestabilidad y alta susceptibilidad a deslizamientos. Esto se debe a la mala gestión de aguas, tanto pluviales como residuales, que se vierten directamente en el terreno, aumentando la saturación del suelo. Además, las obras de movimiento de tierras realizadas sin las técnicas adecuadas han agravado la situación.
El geólogo recomendó la evacuación inmediata de las personas que habitan estas estructuras y advirtió sobre la necesidad de estar alerta, especialmente durante lluvias intensas. Señaló que cualquier sonido inusual en las edificaciones, como crujidos en la madera o el trabe de puertas y ventanas, podría ser un indicativo de movimientos en el terreno, lo que permitiría a los residentes tomar medidas de seguridad a tiempo.
Se insta a la comunidad a mantener la vigilancia y seguir las recomendaciones de las autoridades para evitar tragedias en esta zona vulnerable.
