Como una irresponsabilidad por parte de la Fábrica Nacional de Licores (FANAL) y de las políticas que mantienen monopolios en manos del Estado. Así cataloga la Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria el aviso de NO entrega del alcohol que requiere la industria nacional, producto de gestiones y aprobaciones pendientes que actualmente FANAL gestiona ante la Contraloría General de la República.
Maurizio Musmanni, presidente de CACIA, señaló que la empresa nacional ya no puede estar en manos de monopolios que de la noche a la mañana simplemente avisan que ya no hay producto para comercializar. En un momento donde se debe hablar de reactivación económica y reconstrucción del empleo nacional, la industria requiere de sistemas de abastecimiento en competencia, no estatales y abiertos a los mercados internacionales.
Según los empresarios de alimentos y bebidas, el alcohol tiene múltiples usos en la industria, muchos de ellos insustituibles.
“Desde estrictos protocolos de higiene y limpieza, hasta diversos usos como ingrediente en mezclas o preparaciones para la confección de otras materias primas industriales para la preparación de alimentos y bebidas de todo tipo, motivo por el cual, es realmente impensable que el sistema de producción y comercialización de ese insumo, deje a la industria nacional sin abastecimiento de la noche a la mañana con las graves consecuencias que ello implica”, indicó Musmanni.
A partir de esta situación CACIA envió una misiva a los ministros Renato Alvarado del MAG y a Victoria Hernández de la cartera de Economía, Industria y Comercio, en la que solicitan al Poder Ejecutivo su acción inmediata con tres peticiones:
- que en el plazo inmediato FANAL retome el proceso de abastecimiento de la industria nacional;
- que se abran las posibilidades que la legislación nacional permita para que los usuarios de alcohol se puedan abastecer directamente del sistema azucarero nacional y
- que el Poder Ejecutivo inicie una reforma institucional y legal que liberalice la producción y comercialización de alcohol, de manera tal que se inyecte eficiencia, productividad y acceso a los mercados internacionales sin ningún tipo de restricción arancelaria ni legal a la materia prima.