La Fiscalía General de Ecuador ha anunciado que la vicepresidente Verónica Abad será procesada por su presunta participación en un caso de tráfico de influencias. Este anuncio se produce en el marco del mismo caso en el que ya está siendo procesado su hijo, Francisco Sebastián Barreiro Abad, quien se encuentra bajo medidas cautelares tras haber salido de prisión preventiva.
El fiscal anticorrupción Carlos Leonardo Alarcón informó, a través de un video difundido en la cuenta oficial de la Fiscalía del Estado en la plataforma X, que se ha reunido suficiente documentación, testimonios y grabaciones telefónicas que implican a la vicepresidente en este delito. Debido al fuero de Corte Nacional de Justicia que protege a Abad, el expediente ha sido remitido a dicha unidad para continuar el proceso judicial competente. El próximo paso será la designación de un nuevo fiscal que deberá solicitar la audiencia de vinculación de Abad en este caso.
Abad, quien ha mantenido una confrontación pública con el presidente Daniel Noboa desde que ambos asumieron sus cargos en noviembre pasado, declaró recientemente a Ecuavisa que cree que se están mezclando conflictos personales y políticos en su contra. En diciembre, Noboa designó a Abad como embajadora en Israel en medio de la guerra entre Hamas y el estado israelí, un movimiento que Abad rechazó y denunció como una forma de hostigamiento por parte del gobierno.
El caso Nene, que ha implicado a su hijo, Francisco Sebastián Barreiro Abad, comenzó el 22 de marzo cuando la Fiscalía inició un proceso penal en su contra por tráfico de influencias. Barreiro Abad fue detenido el 21 de marzo y enviado a la cárcel de máxima seguridad La Roca en Guayaquil, medida que algunos juristas y la propia vicepresidente consideraron desproporcionada. Tras una apelación y el pago de una fianza, fue liberado en mayo pero debe presentarse semanalmente ante la Fiscalía y tiene prohibida la salida del país.
Recientemente, Abad informó que el consulado de Estados Unidos en Guayaquil le retiró su visa para ingresar a ese país, sin que se especificaran las razones. La embajada de Estados Unidos en Ecuador ha declinado comentar sobre el asunto, citando la legislación que mantiene reservados los registros de visados.
Medios internacionales ha intentado obtener comentarios del equipo de Abad sin éxito hasta el momento. El desarrollo de este caso sigue siendo un tema de alto interés y continuará bajo la observación pública y judicial.
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