Este jueves, la Asamblea Legislativa aprobó en segundo debate el expediente 23.352, presentado por la diputada Katherine Moreira Brown, que declara el 25 de octubre como el Día Nacional de la Persona de Talla Baja. Esta iniciativa busca visibilizar y crear conciencia sobre las necesidades y derechos de las personas de talla baja en Costa Rica.
La aprobación de este proyecto permitirá que las instituciones públicas se involucren activamente en la organización de actividades orientadas a educar a la sociedad y promover la inclusión de esta comunidad.
Sin embargo, el objetivo de este día va más allá de una conmemoración en el calendario. Se trata de un llamado a la sociedad costarricense para que entienda mejor las necesidades de las personas de talla baja y los cambios que se deben impulsar para garantizar que disfruten de las mismas oportunidades que cualquier otro costarricense.
«Este proyecto me llena de ilusión, porque nos permite seguir avanzando en la visibilización y la inclusión de esta población. Debemos crear conciencia en toda la sociedad sobre la necesidad de generar entornos seguros y accesibles, donde cada persona pueda desarrollarse sin barreras ni discriminación», explicó la diputada Katherine Moreira, quien preside la Comisión de Discapacidad y Adulto Mayor.
El representante de la Asociación Pro Gente Pequeña de Costa Rica, Jimmy Umaña, expresó su alegría y gratitud por la aprobación del proyecto. «Nos llena de felicidad esta iniciativa que nos dará visibilidad y permitirá que las personas tengan más conciencia. Estamos muy agradecidos con doña Katherine y con todos los diputados que hicieron esto posible», expresó Umaña.
Una persona de talla baja es aquella cuya estatura es significativamente menor en comparación con la media de la población debido a una condición genética, hormonal o de desarrollo. Generalmente, se considera persona de talla baja a alguien cuya estatura adulta es inferior a 1.47 metros, aunque este umbral puede variar ligeramente según el contexto médico y social.
La talla baja no es una enfermedad, sino una condición que puede estar asociada a diferentes tipos de displasia ósea (alteraciones en el crecimiento de los huesos) u otros trastornos. Las personas de talla baja enfrentan retos específicos en su vida cotidiana, como accesibilidad, movilidad y discriminación, lo que resalta la importancia de promover su inclusión y garantizar sus derechos.
La Comisión de Discapacidad, presidida por la diputada Moreira, realizó consultas con entes como el Consejo Nacional de Personas con Discapacidad (Conapdis), el Ministerio de Educación Pública, el Ministerio de Justicia y Paz, el Ministerio de Cultura y Juventud y la Caja Costarricense de Seguro Social, entre otras instituciones.
“Nos satisface la culminación del curso legislativo de este proyecto porque esta declaratoria contribuirá a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, en función de reducir las desigualdades y más bien en la búsqueda de una sociedad más inclusiva”, agrega la diputada Moreira.
Con la aprobación en segundo debate, ahora solo resta la firma del Poder Ejecutivo para que este proyecto se convierta oficialmente en ley de la República.
Comunicado diputada | Katherine Moreira
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